Apenas había pasado la una de la madrugada de ayer cuando en la casa de Carlos Mechetti -en el barrio de Barracas, sobre la
calle Pinzón- sonó el timbre. El número uno de la Aduana de Ezeiza abrió la puerta y en ese instante quedó detenido, acusado de liderar una banda dedicada al cobro de coimas para permitir el contrabando de mercaderías en el aeropuerto internacional.
Poco después de la captura, los investigadores de la Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA) -encargados del operativo- registraron el lugar y encontraron allí 800.000 dólares y 120.000 pesos. Parte de los billetes, que fueron secuestrados, estaban en una caja de seguridad. Otra parte, repartido en distintas cajas de zapatos.
Tanto Mechetti -que además es directivo del club Boca Juniors- como los otros nueve detenidos de la causa, comenzaron ayer a ser indagados por el juez en lo Penal Económico N° 8 de Capital Federal, Gustavo Meirovich, y la fiscal María Luz Rivas Diez. Como informó Clarín en exclusiva en su edición de ayer, a la mayoría se los acusa de "contrabando, cohecho y asociación ilicita".
En el total de allanamientos realizados ayer a la madrugada se hallaron desde plata en efectivo (cerca de un millón de dólares en distintos domicilios) hasta perfumes importados y artículos de lujo.
Fuentes del caso adelantaron que aún quedan dos prófugos: "Un guardia de Aduana que justo el miércoles había salido de vacaciones a Mar del Plata, y otro que no estaba en su casa cuando lo fueron a buscar ni se presentó a cumplir su turno en el Aeropuerto de Ezeiza a las cuatro de la mañana de ayer", confiaron las fuentes.
Según confirmó Clarín, entre los 10 detenidos hay dos mujeres (apresadas cuando contrabandeaban mercadería), seis aduaneros (incluido Mechetti) y dos miembros de la PSA. De estos últimos, uno es un soplón de bajo rango (avisaba a los aduaneros si la PSA sospechaba algo), pero el otro es un ex vicecomodoro de la Fuerza Aérea que en la causa del juez Meirovich quedó involucrado en un curioso episodio con la hija de una importante empresaria, a la que habría ayudado a eludir los controles en el aeropuerto.
Este hecho ocurrió a mediados de febrero pasado. Por entonces, del teléfono intervenido de uno de los aduaneros investigados se obtuvo una conversación que involucraba al ex vicecomodoro, quien trabajaba en el área de Relaciones Institucionales de la PSA por un lado, y en paralelo prestaba servicios de logística de seguridad a una importante empresaria.
"Vino ...(nombran al vicecomodoro) y dejó una contribución de 2.500 pesos", dijo uno de los investigados, mientras lo escuchaban en tiempo real. Esto dio pie a que la PSA revisara las grabaciones de las cámaras internas del aeropuerto, especialmente las del sector en el que se revisa el equipaje.
La secuencia que se vio: dos mujeres (una es la hija de la empresaria) pasan el sector de Migraciones con tres carritos llenos de valijas (entre ocho y nueve). Entonces aparece el ex Fuerza Aérea y escolta a la hija de la empresaria caminando. Ambos cruzan el sector de Aduana por el canal destinado a diplomáticos, que por su rango no pueden ser revisados.
"La acompañante de la mujer quedó con las valijas, pero sólo una pasó por el escáner. Cuando las mujeres se van, se ve que el hombre de la PSA vuelve sobre sus pasos y entra a la oficina de Aduana", confiaron las fuentes que relacionan este último tramo con la escucha en la que se hace referencia a los 2.500 pesos de contribución.
"Esta no es una causa con la que se quiera armar escándalo. Los únicos que fueron detenidos en su lugar de trabajo fueron los nuestros, los de la PSA. Al resto se los fue a buscar a su casa, de noche", subrayó a Clarín Salvador Julio Postiglioni, interventor de la PSA, quien así desmintió cualquier interna con las autoridades de la Aduana. Postiglioni confirmó que cuatro de los detenidos por el juez Meirovich ya habían caído presos por lo mismo en una causa federal iniciada en 2007. "Fueron procesados por un juez federal, pero luego misteriosamente la Cámara revocó esta medida", detalló.
Desde la Aduana no hubo declaraciones sobre el tema.